Todo ser humano que haya viajado alguna vez hacia su
corazón, y eso es algo que hemos hecho todos en alguna ocasión, habrá podido reconocer las hermosas visiones que la vida nos tiene guarda en nuestro interior.
Mas allá de los miedos y las limitaciones, y a través de la visión pura del corazón. podríamos recordar muchas cosas a cerca del amor, la libertad, la felicidad, la paz, la belleza, la sencillez, la naturalidad,..., la humanidad.
Dentro de cada persona, y en diferentes niveles de accesibilidad, se encuentra guardado todo un hermoso plan
que nos habla de cómo sería la vida en la tierra vivida en unión con nuestro corazón y sus esencias interiores. Como sería eso que dicen los cristianos de "Crear el cielo en la tierra"
Te invito ahora a que hagas la prueba cuando quieras. Túmbate cómodo, cierra tus ojos, tomate un tiempo para relajarte, sentir tu respiración y hacerte presente, y pide que se te muestren tus visiones mas elevadas.
Si aprendes a enfocarte en tu interior ahí estarán siempre disponibles para ti.
Impulsando para ser vista y creadas fuera.
En estos momentos evolutivos de la humanidad son
muchísimas las personas que están siendo llamadas hacia el
despertar interior, el recuerdo esencial, y con ello hacia la búsqueda de modos
de vida más coherentes con su sentir interior. Modos de vida que se les
acerquen al reflejo exterior añorado de ese plan interior.
Son muchas las personas sintiendo que algo profundo tiene
que cambiar.
Pero, ¿qué tiene que cambiar?
¿La Política, la Economía, La Sociedad, la Familia, la
Educación, la Espiritualidad…?
Muy probablemente pensaras que todo ello debería hacerlo.
Más allá del juego de las apariencias y de la separación,
y de que el mundo y yo somos cosas diferentes, lo único verdaderamente real que
podemos hacer cambiar, evolucionar, trasformar…es siempre a nosotros mismos… y al hacerlo nos damos
cuenta que con ello lo trasformamos todo.
La política, la economía,
la sociedad,….son solo formas de relación entre personas y las visiones a las que
estas están conectadas.
Reflejos de modos de relación individual llevados a lo
macro.
La única verdadera pregunta que deberíamos hacernos y que implica sin duda un gran sentido de responsabilidad y valentía es:
¿Cómo es mi manera de relacionarme con la vida?
¿A qué visión interior estoy sirviendo?
¿Estoy colaborando con la vida para co-crear el plan mas elevado que hay dentro de mí o me perdí entre imágenes del miedo y separación?
Gandhi decia:
“Se tu el cambio que quieres ver en el mundo”
Nadie elige el
miedo, la disfunción y la separación de
manera consciente. Solo a través de la desconexión con uno mism@, se puede
crear y elegir vivir lejos de las esencias del corazón. Así de sencillo nos
habla nuestro interior cuando lo escuchamos.
“Nada exterior podrá ser cambiado a no ser que tu, como
parte de la humanidad, te responsabilices de tu parte”
El mundo en el que vivimos no es más que el reflejo de
nuestras visiones. Las conscientes y las inconscientes. Es el reflejo de nosotros mismos y de las elecciones vitales que tomamos conectados y
desconectados a nuestros corazones.
Responsabilizándonos de mantener viva nuestra visión
interior y proyectándolo a través de nuestra acción cambiamos al mundo entero.
Elegimos irremediablemente casi sin darnos cuenta co-crear desde la paz un Nuevo Mundo basado en las mismas esencias. Las mismas elecciones. Las que proceden de todo corazón humano y se reconocen por vibración.
Es sencillo. La clave está en ir al
corazón y pedirle que nos recuerde. Una y otra vez.
Así entenderás con claridad que es lo que viniste a hacer aquí.
Confianza
Dejémonos de distorsiones y engaños, y recuperemos nuestro poder para co-crear juntos a través de nuestras visiones
interiores más elevada.
Simple... de dentro hacia fuera.
Simple... de dentro hacia fuera.